El tráfico de vida silvestre amenaza a la Amazonía ecuatoriana

El medio internacional InSight Crime publicó un reportaje sobre este tema

El medio internacional InSight Crime publicó un reportaje sobre este tema/ Foto: cortesía MAATE

El tráfico de vida silvestre en la Amazonía ecuatoriana es una preocupación creciente. Plantea serios desafíos para preservar la rica biodiversidad de la región.

Las Direcciones Zonales en la Amazonía ecuatoriana del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), en sus redes sociales, casi todas las semanas están informando sobre los rescates a animales silvestres que, en coordinación con la Unidad de Policía del Medio Ambiente (UPMA), realizan en esta zona.

Se estima que cientos de miles de especies son víctimas del tráfico de vida silvestre, poniendo en riesgo a la fauna de la región. La severidad de esta situación se ve agravada por la falta de conciencia de la población local acerca de la importancia de la preservación de las especies.

De acuerdo con un reportaje del medio InSight Crime, “En Ecuador se capturan tortugas, loros y monos” muchas veces para ser mascotas o para alimentarse de sus partes. Así mismo el MAATE ha liberado boas, osos perezosos, caimanes y guacamayos.

En este reportaje también se señala que los intermediarios suelen ponerse en contacto con miembros de las comunidades indígenas locales de la Amazonía para comprarles animales a un precio extremadamente bajo y luego venderlos a un precio mucho mayor.

La explotación de la vida silvestre en Ecuador está muy relacionada con el tráfico ilegal generando una pérdida significativa difícil de medir, de la fauna amazónica. La demanda de los mercados ilegales aumenta el tráfico de vida silvestre y el comercio ilegal de especies de la región amazónica.

Una de las principales preocupaciones es la destrucción de sus hábitats, poniendo en desequilibro esta zona.

Aun cuando el MAATE trabaja en controles permanentes para frenar el tráfico de especies de vida silvestre, la institución ha señalado que es necesario que la ciudadanía haga conciencia del daño irreversibles que se produce en el ecosistema ante estas prácticas ilegales.