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Erosión regresiva: La variante del SOTE registra un avance del 91% y la del OCP del 62,2%
Las pérdidas, que ya suman $ 533 millones, se recuperarán con mayor producción de crudo en 2022, según el presidente Lasso.
Las pérdidas, que ya suman $ 533 millones, se recuperarán con mayor producción de crudo en 2022, según el presidente Lasso. / Foto: Cortesía
La construcción de la séptima variante del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE), ubicada en el sector de San Luis, provincia del Napo, se realiza conforme el cronograma planificado, con un avance de obra del 91%, hasta este 20 de diciembre, informó el Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables.
Según un comunicado de prensa, el pasado lunes, el gerente General (s) de Petroecuador, Pablo Luna, supervisó los trabajos en la zona. Destacó que pese a las condiciones climáticas, el personal técnico trabaja en jornadas intensas de 24 horas al día en la construcción de las variantes emergentes.
Estas acciones permitirán retomar el bombeo de crudo y precautelar la integridad de las tuberías que transportan hidrocarburos desde la Amazonía. Aproximadamente, 200 técnicos de Petroecuador y del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, avanzan con las labores y maniobras de ascenso de 130 metros de la tubería correspondiente a la séptima variante del SOTE.
El Oleoducto de Crudos Pesados, OCP Ecuador, también trabaja en jornadas de 24 horas para concluir con la construcción de su variante. El avance actual de esta obra es del 62.6% y se espera concluir la primera semana de enero de 2022.
Paralelamente, según la cartera de Estado, se realizan monitoreos permanentes de agua y suelo durante las labores de construcción de las dos variantes. Además, Petroecuador y OCP disponen de un plan de manejo ambiental de respuesta a emergencias y contingencias ante los eventos adversos que pudieran presentarse durante la ejecución de estos trabajos.
Al momento, como medida preventiva, se mantienen suspendidas las operaciones de transporte de petróleo y derivados de combustibles, a través del SOTE, el Poliducto Shushufindi-Quito y el Oleoducto de Crudos Pesados. Las operaciones de despacho y distribución de combustibles son normales en todo el país y el abastecimiento a escala nacional se encuentra garantizado.
El presidente de la República, Guillermo Lasso, aseguró que las pérdidas para el país ascienden a $ 533 millones, los cuales se buscarán recuperar en 2022 con mayor producción petrolera a través de la facilitación de contratos con las empresas privadas.
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