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La aprobación sobre la presencia de militares de EE. UU. en Ecuador tiene 2 vías
La viabilidad de la propuesta puede estar en la cancha de la Corte Constitucional o de la nueva Asamblea Nacional


La viabilidad de la propuesta puede estar en la cancha de la Corte Constitucional o de la nueva Asamblea Nacional/ Foto: cortesía EFE
La noticia provino desde Washington D.C. A inicios de octubre, por medio del periódico Washington Examiner, se conoció que el Gobierno de Estados Unidos y Ecuador firmaron un acuerdo de cooperación militar que, básicamente, permite la operación de soldados norteamericanos en territorio nacional.
Según el periódico estadounidense, el acuerdo le permitirá a la administración del presidente Joe Biden enviar fuerzas militares, tanto en tierra como frente a las costas ecuatorianas. El medio añadió que miembros selectos del Congreso fueron informados durante una reunión informativa privada en el Capitolio con el presidente ecuatoriano Guillermo Lasso.
El acuerdo marítimo permite que buques militares estadounidenses estén presentes en las aguas frente a la costa noroeste de América del Sur, que los cárteles de la droga colombianos utilizan para transportar cocaína. Se espera que la capacidad de trasladar embarcaciones militares al área “fortalecerá las actividades cooperativas de aplicación de la ley y creará capacidad mutua para prevenir y combatir la actividad marítima transnacional ilícita”.
El otro acuerdo ha sido considerado menos común y es la presencia de soldados norteamericanos en territorio ecuatoriano.
El canciller de Ecuador, Gustavo Manrique, ya ha aclarado que no se trata de una nueva Base de Manta, que operó en el país hasta 2009, y debió salir por la aprobación de la nueva Constitución, que prohíbe este tipo de operaciones en nombre de la soberanía nacional.
Pero ¿qué debe pasar para que este acuerdo sea una realidad? Manrique señaló que se enviará la propuesta legal a la Corte Constitucional (CC) para su aprobación debido a que actualmente no hay una Asamblea Nacional tras la ‘muerte cruzada’ que la disolvió y llamó a elecciones generales anticipadas.
Manrique no fue del todo claro. La primera opción es enviar la propuesta legal a la CC, pero también puede ser enviada a la nueva Asamblea Nacional, que asumirá entre finales de noviembre y principios de diciembre.
Para el experto en seguridad Lautaro Ojeda, lo más probable es que Lasso se incline en enviar a la Asamblea porque actualmente el mandatario solo puede enviar a la CC proyectos legales con carácter económico urgente y la propuesta de ley no tiene relación con temas económicos.
Al llegar a la Asamblea, dijo Ojeda, una opción es que se entrampe o, de plano, se archive, debido a la mayoría correísta o de izquierda que, por temas ideológicos, no están de acuerdo con la presencia de soldados norteamericanos en el país.
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