La deforestación de la Amazonía ecuatoriana genera preocupación mundial

La conversión de la selva en tierras de cultivo y pastizales ha sido una de las principales causas

La conversión de la selva en tierras de cultivo y pastizales ha sido una de las principales causas/ Foto: cortesía FF.AA

En los últimos años, la deforestación en la Amazonía ecuatoriana ha alcanzado niveles alarmantes, generando preocupación no solo localmente, sino también a nivel global. Este pulmón verde del planeta, que alberga una rica biodiversidad y desempeña un papel crucial en la regulación climática, está enfrentando una amenaza constante debido a la expansión de actividades humanas como la agricultura, la minería y la explotación forestal.

La Amazonía ecuatoriana, que comprende una parte significativa del bioma amazónico total, alberga una variedad de especies vegetales y animales únicas, muchas de las cuales no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. Sin embargo, la creciente demanda de tierras para la agricultura y la ganadería, así como la extracción de recursos naturales, están llevando a una rápida pérdida de hábitats y a la fragmentación del bosque.

De acuerdo al informe de la organización Global Forest Watch, Ecuador se encuentra entre los 10 países con mayor aumento en la pérdida de bosques primarios en 2022.

La conversión de la selva en tierras de cultivo y pastizales ha sido una de las principales causas de la deforestación en la Amazonía ecuatoriana.

La tala ilegal de árboles para la obtención de madera y la expansión de la minería también están contribuyendo significativamente a la degradación del bosque.

El crecimiento descontrolado de las plantaciones de palma de aceite y balsa está impulsando la deforestación en la Amazonía ecuatoriana, según una nota de julio de 2023, que salió en Mongabay. Estas actividades agrícolas y de explotación forestal están generando una pérdida alarmante de bosques y biodiversidad en la región.

La expansión de la palma de aceite y la demanda de madera de balsa están amenazando los hábitats naturales, contribuyendo a la fragmentación del bosque y poniendo en peligro a las especies únicas que habitan allí. La falta de regulación y el cumplimiento inadecuado de las leyes han exacerbado este problema.

La deforestación en la Amazonía ecuatoriana es una crisis ambiental que requiere una acción inmediata y coordinada.