Opinión
La regeneración del Centro histórico de Quito depende de la política
Ha perdido el 40% de su población en 20 años
La inauguración del metro de Quito ha abierto esperanzas para que se pueda regenerar el casco histórico de Quito, que se encuentra en una lamentable situación. Ha perdido el 40% de su población en 20 años. Pero la triste realidad es que la situación en la que se encuentra no se debe ni a la falta de infraestructuras, ni a la falta de capacidad, ni a la falta de capital.
Se debe, como ocurre también en la economía Ecuador y en gran parte de América Latina, a las nefastas leyes y políticas que aprueban nuestros políticos se debe a que el municipio de Quito y la Ley de Cultura impiden la compraventa de inmuebles en el centro de Quito y dificultan tantísimo la regeneración de nuevos espacios que es imposible que los ciudadanos puedan vivir ahí.
Lo único que hace falta es algo tan sencillo como una ley de patrimonio a imagen y semejanza de otras muchas que hay en el mundo. Una ley que sí obligue a conservar las fachadas y los elementos arquitectónicos que son patrimonio de la humanidad, patrimonio de todos. Pero permita la compra venta, la inversión, la regeneración a través de inversión de capital privado, sin tanta burocracia.
Era tan sencillo como eso.