Las provincias amazónicas pagan más impuestos de lo que se había calculado

Un análisis del SRI identifica un aporte mayor de hasta 318 %

Un análisis del SRI identifica un aporte mayor de hasta 318 %/ Foto: cortesía SRI

Una mirada más amplia a la contribución de impuestos. El Servicio de Rentas Internas (SRI) presentó ayer, 5 de septiembre, un reporte denominado la Recaudación Tributaria por Hecho Económico.

¿En qué consiste el análisis? El SRI señala que una forma habitual de presentar la recaudación es por provincia. Esta se refiere al lugar geográfico en el cual se encuentra domiciliado fiscalmente el contribuyente, mas no en el que sucede el hecho económico generador del impuesto. Es decir, donde se registró el RUC y no donde se realizan, por ejemplo, las ventas de una empresa.

Muchos negocios, sobre todo los de mayor envergadura, dice el SRI, como comercios al por mayor y menor, gasolineras, farmacias y similares, tienen operaciones interprovinciales o a nivel nacional que distorsionan esta cifra de recaudación provincial.

Otro ejemplo: una empresa petrolera puede estar domiciliada en Quito, pero su actividad económica la ejecuta en provincias de la Amazonía.

Y eso se evidencia en los nuevos cálculos del estudio del SRI. Con el análisis habitual, la provincia de Orellana reportó una recaudación de impuestos de $ 39 millones, pero al tomar en cuenta los hechos económicos pasa a $ 124 millones, un aumento de 318 %.

En el caso de Sucumbíos pasa de $ 34,9 millones a $ 78,5, un incremento de 224 %. Zamora Chinchipe pasa de $ 413 millones a $ 415 millones, 0,51 % más.

En Napo va de $ 18,4 millones a $ 27,5 millones, 49,30 % adicional. En Morona Santiago, la cifra de $ 29,6 millones sube a $ 34 millones, un aumento de 15 %. En Pastaza incrementa de $ 17,9 millones a $ 37,7 millones, 111 % más.

Del otro lado, en el caso de Pichincha hay una caída del 18,30 %, según los cálculos de la entidad tributaria.

El director general del SRI, Francisco Briones, señaló que el reporte busca explicar de manera más real el aporte de las provincias al fisco, lo cual, en el futuro, puede implicar una mejor distribución de las asignaciones.