Evaluación del gobierno de Lasso

El crecimiento económico está en un índice paupérrimos que no son suficientes para sacar adelante la economía del país.

El crecimiento económico está en un índice paupérrimos que no son suficientes para sacar adelante la economía del país./ Foto: El Oriente

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Finaliza el gobierno de Guillermo Lasso Mendoza, finaliza precipitadamente y es hora de hacer una evaluación.

Y por fortuna, podemos hacer una evaluación más o menos objetiva, puesto que en el año 2021 junto a Pablo Lucio Paredes, escribimos un Koyuntura Express en el que marcábamos 12 indicadores que eran medibles y que esperábamos que el gobierno de Lasso pudiera alcanzar o cumplir durante su mandato. Ahora, en noviembre del 2023, hemos vuelto a escribir una Koyuntura Express, viendo cuánto de esos indicadores se han cumplido durante este período, que es menos del mandato de cuatro años y, por desgracia, los resultados no son tan positivos.

Empecemos por lo bueno. Es verdad que la pobreza se ha reducido de manera sustancial durante el gobierno de Lasso y eso es digno de celebrar. El índice de libertad económica también ha mejorado bastante. La apertura comercial, a pesar de que no se dio la entrada a la Alianza del Pacífico, también ha mejorado bastante. Pero esto es lo positivo.

En mejoras que no son tan buenas, pero que si son mejoras, el empleo adecuado ha mejorado. No tanto como nos gustaría debería haber sido. Y la desnutrición crónica infantil ha mejorado. Es más, es bastante importante que se haya puesto el foco del Gobierno sobre este problema y se haya empezado a solucionar. Por desgracia, los otros indicadores que podemos comparar no son tan positivos.

El crecimiento económico está en un índice paupérrimos que no son suficientes para sacar adelante la economía del país. El índice de corrupción ha empeorado y la situación o la sensación generalizada es muy negativa. El riesgo país está en unos niveles disparatado y debería bajarse muchísimo más. El tamaño de gobierno no se ha reducido, es más, ha aumentado y es imperativo reducirlo. El déficit fiscal sigue siendo inasumible para una economía sana. Por tanto, viendo los doce indicadores, por desgracia en cinco el resultado es muy negativo.

Pero es que además, el año 2021 ni siquiera incluimos el índice de violencia, que es probablemente lo que más ha empeorado el país, porque entonces no considerábamos que era un tema que era prioritario porque estaba bien y no nos preocupaba. Además, ni siquiera se nos pudo imaginar que en 2023 íbamos a volver a vivir una situación como la que tenemos con apagones en el servicio eléctrico.

Esos son los principales deméritos del gobierno de Lasso y eso es una manera de evaluarlo o más bien objetiva. Por desgracia, queda mucho por ver, queda mucho por hacer y aquello que se prometió o que se esperaba que se iba a cumplir en el 2021. Ahora hay que desearle toda la suerte del mundo al gobierno de Noboa y también pedirle que mejore en todos estos indicadores, porque es imperativo para el bienestar de los ciudadanos de Ecuador.