Jornada de reflexión en décimo aniversario del polémico 30-S en Ecuador

La Asociación de Víctimas 30-S conmemoró este miércoles el décimo aniversario de ese dramático episodio en la vida política ecuatoriana con un acto cívico en el que apuntaron que esta es una jornada de reflexión para la nación.

Jornada de reflexión en décimo aniversario del polémico 30-S en Ecuador / Foto: EFE

La Asociación de Víctimas 30-S conmemoró este miércoles el décimo aniversario de ese dramático episodio en la vida política ecuatoriana con un acto cívico en el que apuntaron que esta es una jornada de reflexión para la nación.

El 30 de septiembre de 2010, una protesta policial por temas salariales derivó en una ola de disturbios de proporciones que el Gobierno de Rafael Correa (2007-2017) consideró un intento de golpe de Estado.

"Este es un gran día de reflexión para el país. El 30-S, diez años después, podemos darle un giro al escenario que representó la represión y la persecución política", dijo el presidente de la Asociación, Oscar Ayerve, antes de recordar que ese episodio condujo a la condena de "cientos de militares y policías siendo inocentes".

Por ello, hoy se recuerda a esos "héroes que lucharon persistentemente", aseveró.

Ayerve reveló que la Asociación ha tramitado "188 casos que han sido declarados libres, en prelibertad e inocentes. Tenemos 38 casos en la Corte Nacional de Justicia con recursos extraordinarios de revisión que, con la documentación presentada, estamos seguros (de que) serán declarados inocentes".

DIEZ AÑOS DE LUCHA

Algo más de medio centenar de personas se concentraron este miércoles en una plaza en Quito para rechazar los sucesos del 30 de septiembre de 2010.

En la reunión desarrollada este miércoles en Quito, Juan Carlos Robalino, uno de los militares que participó en el 30-S, aseguró que recuerdan a las "víctimas, soldados y policías presos, gente que fue arrestada, dada de baja de las fuerzas militares y policiales".

"Ha sido una lucha tenaz", señaló, al apuntar que han sido "perseguidos" por más de nueve años, tiempo en el que han invertido gran cantidad de dinero en abogados.

Agregó que en 2010 estaban "indignados" ante la posibilidad de que el Gobierno les retirase algunos derechos adquiridos y por ello protestaron "en paz" el 30 de septiembre.

Pero después, algunos militares fueron acusados de sabotaje y terrorismo, luego por atentar contra la seguridad del Estado y por último por rebelión, anotó.

"Imagínese, (llamar) terrorista (a) soldados que habíamos estado en dos conflictos", defendiendo la soberanía del país, dijo en referencia a los desatados por problemas limítrofes con Perú, ahora resueltos.

Tras haber sido sobreseído el pasado 20 de febrero por prescripción de la causa, Robalino comentó que los abogados les han hablado de la posibilidad de un proceso de reparación por el daño moral y psicológico.

"Hay que presentar todas las pruebas, durante estos nueve años y cinco meses, de lo que se gastó. Estuvimos con psiquiatras, con psicólogos. Hay mucha gente que tuvo enfermedades catastróficas, crónicas, falleció mucha gente. No es chiste esto de los nueve años y cinco meses que vivimos perseguidos", subrayó.

En la concentración para recordar los hechos ocurridos hace una década, se leían carteles con eslóganes como "30S la farsa más grande de la historia. Quién responde por los muertos, procesados y dados de baja".

Los participantes lucían camisetas azules con el escrito 30-S en amarillo, colores que se repetían en banderas con la leyenda "30S nunca más".

En el acto, colocaron una ofrenda floral con los colores de la bandera de Ecuador y cantaron el himno nacional en la Plaza Bolívar, bajo un monumento en honor al libertador.

EL DEBATE CONTINÚA

Una década después, el 30 de septiembre continúa generando en Ecuador profundas discrepancias entre lo que Correa considera un intento de golpe de Estado y de magnicidio, y que ciertos periodistas y testigos aseguran que fue una "protesta policial" que escaló cuando el entonces gobernante acudió al sitio de la manifestación.

Correa dijo recientemente a Efe que el 30 de septiembre "fue la primera vez en la historia que el pueblo salió a defender a su gobernante, no a apoyar a la Policía o los insurrectos para botar al Gobierno".

Bajo la Presidencia de su excorreligionario y ahora rival, Lenín Moreno, se desclasificaron documentos de la época, se están abriendo causas relacionadas con aquella violenta jornada y se empiezan a conocer testimonios de procesados y periodistas que contrastan con el relato oficialista, marcado sobre todo por las conclusiones de la llamada Comisión del 30-S designada por Correa.