La leche es un aliado para combatir la Desnutrición Crónica Infantil

Ecuador es un país en el que, a pesar de la producción de alimentos, suficiente, esta no está distribuida adecuadamente

Ecuador es un país en el que, a pesar de la producción de alimentos, suficiente, esta no está distribuida adecuadamente/Foto: Cortesia R. Gómez de la Torre

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La semana pasada existieron dos celebraciones, que además de darse el mismo día, también están directamente relacionadas.

Hablo del Día Internacional del Niño y del Día Mundial de la Leche. Si bien, el Día Internacional del Niño se lo instauró en 1925 y en la gran mayoría de países se lo celebra el 1 de junio, esta importante celebración puede variar de fecha entre países.

En 2001, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estableció el 1 de junio como el Día Internacional de la Leche. Se debe a la importancia de este producto para la alimentación y la nutrición en todas las etapas de la vida del ser humano, con especial énfasis en la niñez y la adolescencia.

Ecuador es un país en el que, a pesar de la producción de alimentos, suficiente, esta no está distribuida adecuadamente. Y en el que las tendencias y las modas y otros patrones socioeconómicos, han llevado a que la Desnutrición Crónica Infantil (DCI), especialmente de 0 a 2 años (primeros 1.000 días, contados desde la concepción hasta los 2 años), de acuerdo a las mediciones estadísticas, evidencie un crecimiento sostenido.

La leche y de manera similar todas las proteínas de origen animal tienen una altísima asimilación en el organismo, que puede llegar hasta el 98 %, lo que las proteínas de origen vegetal no tienen la misma asimilación. De igual manera, las proteínas de origen animal contienen todos los aminoácidos esenciales para el adecuado desarrollo del cerebro y de los músculos. En el caso de la Vitamina B12, esta se la puede encontrar únicamente en alimentos de origen animal.

Estas condiciones ubican en particular a la leche y los productos derivados como yogurt, queso, crema y tantos más, en uno de los aliados más relevantes para combatir la DCI, donde el impulso adecuado en información hacia la base social, principalmente, aportaría de manera directa a una mejora en la nutrición. Y, por tanto, a una mejora en el desarrollo de los ciudadanos en su primera infancia y las consecuencias positivas en su futuro.