El Gobierno de Lasso no parará o disminuirá la producción petrolera en el Yasuní

La actual administración dejará un plan para el desmonte de operaciones en el Bloque-43 ITT

La actual administración dejará un plan para el desmonte de operaciones en el Bloque-43 ITT/ Foto: cortesía Ministerio de Energía

El gobierno saliente del presidente Guillermo Lasso no parará o bajará la producción de petróleo en el bloque 43-ITT. Así lo aseguró el ministro de Energía, Fernando Santos, ayer, 23 de agosto.

El ‘Sí’ de la consulta popular, es decir, dejar el crudo bajo tierra, está a puertas de ganar con el 58,97 % de votos a favor. Mientras que el ‘No ’logró el 41,03 %. Sin embargo, en las provincias de Orellana y Sucumbíos, principales zonas de influencia de la explotación del Bloque 43-ITT, el ‘No’ gana con el 57,99 y 51,59 %, respectivamente.

En ese contexto, el titular de la cartera de Estado señaló que esperan la proclamación de resultados por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) para emprender acciones.

La actual administración, dijo Santos, dejará un plan para el desmonte de operaciones en el Bloque-43 ITT para que sea ejecutada por el próximo gobierno. Cuando se aprobó la consulta popular por el Yasuní, la Corte Constitucional dio el plazo de un año para frenar el bombeo de crudo en la zona, es decir, hasta fines de agosto de 2024.

Sin embargo, Santos ya mira problemas legales del referéndum. “Orellana es la única que puede decir Sí o No al cierre del ITT”. Añadió que la constitución, en el artículo 57, numeral 7 señala que “quienes tienen que decidir si se inicia o termina una operación de explotación de recursos son los habitantes del territorio”.

No obstante, Santos dijo que el Gobierno no interpondrá ninguna acción ante la CC, pero sí lo podrán hacer las comunidades o los gobiernos locales de la Amazonía.

La producción de crudo en el Bloque 43-ITT supera los 58 mil barriles por día. Su impacto será de $ 1.200 millones al año.

El plan correísta: desoír la consulta

La tesis de Santos también es compartida por el correísmo. El Oriente conoció que, de llegar al poder, la Revolución Ciudadana espera interponer una acción en la Corte Constitucional en el que se señale que solo la comunidad puede decidir al respecto.

Su candidata Luisa González había manifestado que no está a favor de la consulta popular para dejar de producir crudo del Yasuní.

El plan correísta siempre ha requerido de “petrodólares” para el abultado gasto público. De llegar a Carondelet su idea es buscar la manera de esquivar la consulta con el fin de contar con recursos para no realizar algún recorte o ajuste al gasto público.

Hay cálculos que señalan que los gobiernos de Correa llegaron a gozar de ingresos cercanos a los $ 80 mil millones durante sus años de gestión, con un precio promedio de barril de crudo de $ 74,09.